Al agua pato

Después de mucho he vuelto a darme un baño relajado, sin la tensión de los exámenes.
Al acabar las clases con la comida todavía en la garganta, me he podido dar un baño con final doloroso para los ojos , lluvia que parecía granizo en la cara, con el viento que a las 17.00 empezó a aumentar hacía que las gotas entraran en los ojos y no se pudiera ver nada .

 Aún así después de aguantar 20 minutos más nos salimos a cambiar en los coches, con una tromba de agua encima.